Hoy, os traemos un post de blog muy importante para nosotros, sobre los símbolos, ya que tratamos de dar sentido a todos los que empleamos. ¡Y no son pocos!
Nuestros símbolos más significativos son los siguientes
- “El abrazo de manos” que representa al equipo, a la fuerza de la unión y al objetivo compartido.
- El Cap de Creus simboliza el proyecto de vida, el sueño al que nos dirigimos, la propia travesía simboliza la vida y los pasos y decisiones que vamos dando hacia ese Cap de Creus.
- La despedida bajo el arco de palos significa el envío del amigo a la realidad y el agradecimiento por su participación.
- Cruzamos puentes unidores, representan el esfuerzo de generaciones anteriores para unir pueblos y facilitarnos los avances, los cruces de frontera significan la poca importancia que tienen las fronteras aunque causen tantos lamentos.
- El haya es la acogida y el buen trato cuando el calor aplasta.
- La lectura en círculo, la unión de espíritus solidarios, la imposibilidad de segundas filas.
- Los lemas como “cada gota cuenta” se relacionan con la dignidad humana. La presentación haciendo referencia a nuestra ciudadanía….
- Mirar lejos al horizonte infinito es mirar al futuro con limpieza y optimismo.
- Caminar hacia ese lejos con esfuerzo y alegría simboliza el camino de vida, mirar cerca a la flor, la piedra, la raíz o la hojarasca… es el aquí y ahora.
- El silencio nos lleva a la introspección.
- Un día está el fuego en el que quemamos aquello que nos hace sufrir como colectivo humano, simboliza los pasos que queremos dar hacia ese mundo mejor.
- Los caminos de la fuga por los que tanta gente se refugió en Francia cuando en esta tierra venían mal dadas, tienen un paralelismo importante con los actuales refugiados.
- El estrobo que llevamos desde Hondarribia simboliza la armonía y el esfuerzo en un equipo compactado.
- El chaleco de Lesvos, nuestro apoyo a quienes sufren.
- La makila hondarribitarra, significa la implicación de responsabilidad en el cuidado de la naturaleza…
- El agua transportada de mar a mar, la ducha del refugio que despierta y purifica, la atención plena en un momento determinado, los rododendros en flor, las marmotas que saludan a nuestro paso, la música que nos recibe, la mano al hombro, …
pequeñas cosas que son acogida, respeto y un grito, a veces silencioso de ánimo, ese que te dice “estamos con vosotros”…
Tantas y tantas cosas que convierten la travesía en grande y acogedora…
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